Feyisa Lilesa, plata en el maratón masculino, tuvo un gesto particular al culminar la competencia.
Cuando cruzó la línea de meta situada en el famoso Sambodromo de Río de
Janeiro, el atleta elevó los brazos y los cruzó en señal de protesta.
Luego de la carrera, el joven corredor de 26 años explicó los motivos por los cuales realizó este gesto.
“El gobierno de Etiopía está matando a
la población Oromo del país y les está sacando todos los recursos que
tienen. Los oromos están protestando y yo me sumo a la causa porque
formo parte de ellos. El gobierno está matando a mi gente y por eso voy a
dar voz a estos hechos allá donde vaya. Mis amigos y familiares están en prisión y si hablan de derechos democráticos les matan”, confesó.
El gobierno, en un plan de expansión de
la capital, incluyó la ocupación de un espacio de terreno en la región
de Oromía y sus habitantes protestaron por lo que calificaron de
marginalización continua de su población.
Sobre si volverá a Etiopía o no, Lilesa
sostuvo que: “Lo tengo que hablar con mi familia y mis amigos. Si vuelvo
a Etiopía seguramente me matarán. Si no me matan, me encerrarán en la
cárcel. No lo he decidido todavía pero seguramente me iré a vivir a otro
país”, concluyó el maratonista.
Fuente: Mundo Deportivo
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